1981

Como no puedo hablar de 1981 sin recordar ese grito tan conocido "quieto todo el mundo", estoy totalmente seguro de que ya sabéis de lo que estoy hablando, sobretodo los de mi generación. El 23 de febrero el teniente coronal Tejero irrumpió en el Congreso de los Diputados durante el acto de investidura de Leopoldo Calvo Sotelo como Presidente del Gobierno. Afortunadamente tras una tensa espera el golpe de estado fracasó y se retornó al orden constitucional. En Septiembre llegó a Madrid procedente de Nueva York el "Guernica" de Picasso. El el extranjero fueron noticia destacada dos atentados, el primero de ellos en Mayo en la Plaza de San Pedro, Alí Agcá atentó contra Juan Pablo II, y en Washington John Hickley le propino seis disparos a Ronald Reagan. Ambos sobrevivieron pero con graves secuelas. De nuevo este año tenemos noticias de la prensa rosa, fue el enlace nupcial entre Carlos de Inglaterra y Lady Diana Spencer que tantos ríos de tinta vertió durante muchos años.

Este año se produjo un cambio importante dentro de la Unión de Comparsas. En una asamblea de la Asociación celebrada en los salones de la planta superior del cine "La Esperanza" resultó elegido Presidente de la Unión de Comparsas un joven festero de la Comparsa Tuareg, Francisco Morales Blasco, con los votos a favor de la Comparsa Zingaros de la cual era ya compromisario. Esto llevó a la Junta Central a mi padre como Tesorero y a mi madre como vocal y a mí me permitió comenzar a conocer los entresijos de una Entidad de la que con el tiempo llegaría a la vicepresidencia, pero esta historia es más lejana y ya llegará el momento de recordarla.

De momento nos quedamos en 1981 y el tercero de B.U.P. en la frontera entre dieciséis y diecisiete años de edad. En este curso ya había que decidirse entre ciencias y letras, elegí ciencias y evidentemente me equivoqué pero en fin una vez puestos había que apechugar con aquello, de los profesores de aquel año tengo imágenes bastante distorsionadas, no se si por mi propia memoria o porque no aportaron mucho a mi futuro, recuerdo a Juanma, filosofía, quien por cierto me pilló copiando descaradamente, he de reconocerle su mérito puesto que no son muchos los profesores que pueden vanagloriarse de haberme cogido copiando, recuerdo tambien a José Vicente, matemáticas, que lleve suspensa hasta el año siguiente, al cura gordo en religión, al que poniamos tiza en el asiento, estuve exento de gimnasia y ayudaba a algunos compañeros a dar vueltas al cardio subido en sus motocicletas, y poco más recuerdos de aque año. Me parece más interesante comentar el master en chuletas que realicé junto a mis primas durante nuestra época de instituto, las realizabamos de todas las formas, medidas y colores llegando a especializarnos en el tema. Con la experiencia y la edad te das cuenta que si hubiesemos empleado el tiempo de copia en estudio otro gallo hubiera cantado, o quizá el mismo pero que nos quiten lo que nos reímos y disfrutamos. También recuerdo, quizá fuera en verano, y se que es ese año porque realizaba caricaturas del profesor de matemáticas, que nos juntamos todos los primos en el primero izquierda e hicimos una güija, y el vaso se movió y contestó preguntas que nadie allí sabía y me asusté y puedo asegurar que no lo he vuelto a hacer en mi vida ni lo haré.

Se aproximaba Abril y de nuevo otro año más como Capitán de la Comparsa Zingaros, este año acompañado de mi prima Mónica, que guapa eh, pero bueno al tajo. La Presentación, como venía siendo habitual, se desarrolló en el cine "La Esperanza" junto con la Comisión Municipal de Fiestas. Y por fin en Abril de nuevo las Fiestas. Estas transcurrieron igual que en años anteriores con la única particularidad de que cada vez eramos menos y ya no se podía mantener una Comparsa con ese número de asociados. Cuando los niños crecieron  comenzaron a volar a otras comparsas donde tenían sus amistades y su ambiente. Este fue el final de la Comparsa Zingaros, una comparsa que pese a estar tan solo cuatro años en la Fiesta dejó un legado impresionante. Tres parejas de Capitán y Abanderada del Bando Cristiano; 1978, Pepe y Aida; 1979, Santiago y Manoli; 1987, Mariano y Angelita; dos Embajadores, Pepe y José Antonio que también fueron los autores de los textos originales de las dos Embajadas que se representan en San Vicente. Con este bagaje ninguna Comparsa de San Vicente ha dado tanto en tan poco tiempo por esta Fiesta.

Por mi parte una vez acabada la Fiesta de 1981 ingresé junto con Aidita, mi bastón y amiga durante muchos años, en la Comparsa Tuareg y ese mismo año ya desfilamos en el Mig Any con nuestros nuevos compañeros de viaje que por el momento siguen siendo los mios. Pero nunca olvidaré ese sueño que fue la Comparsa Zingaros, el sueño de una familia y de sus amigos por participar y poner su granito de arena en algo tan grande como la Fiesta de Moros y Cristianos de San Vicente.

No se debe dejar en el olvido en este último año Zingaro la figura de doña Pepita Moltó, verdadero motor festero de la Comparsa, era ella quien nos movía, quien nos ensayaba, quien nos decía como y donde ponernos. Yo, personalmente la considero una de las piezas fundamentales, no sólo de la Comparsa Zingaros, sino dentro de todo el entramado festero desde hace muchas décadas. Su empuje, su desparpajo y sus ganas de vivir la Fiesta nos alimentaron a todos en esos primeros y difíciles años, por todo ello, gracias doña Pepita.